Al practicar un deporte de manera constante o de forma profesional es normal que se puedan presentar ciertas lesiones propias del desgaste o el esfuerzo en las zonas del cuerpo involucradas en la actividad. Por ello, es importante contar con rutinas de calentamiento previo así como cuidados especiales para evitar que la lesión se agudice y ponga en riesgo tu salud.
Hay que destacar que cada deporte o disciplina requiere de entrenamientos específicos para mejorar el rendimiento de la persona, y al mismo tiempo, para mantener en buenas condiciones las partes del cuerpo con mayor desgaste. La medicina del deporte en CDMX recomienda realizar consultas de fisioterapia periódicas para conocer mejor los cuidados que requiere cada disciplina.
Por ejemplo, el ciclismo es una actividad deportiva que puede realizarse de forma profesional o amateur, en la cual se necesitan de acciones preventivas y de acondicionamiento físico para fortalecer rodillas, espalda, piernas y brazos, y evitar alguna complicación en músculos y articulaciones clave durante alguna competencia.
¿Cuáles son las lesiones más comunes en el ciclismo?
El ciclismo es una de las actividades físicas más populares del mundo, ya sea como deporte competitivo, medio de transporte o forma de recreación y ejercicio. A pesar de sus múltiples beneficios para la salud cardiovascular, muscular y mental, también puede provocar lesiones debido al uso repetitivo de algunos músculos, la postura prolongada sobre la bicicleta y la falta de una técnica adecuada.
Entre las molestias más comunes en los ciclistas tanto principales como profesionales se encuentran los dolores de rodilla, espalda y cuello. Dentro del ciclismo, la fisioterapia CDMX desempeña un papel esencial, no solo en la recuperación de lesiones, sino también en la prevención y en el rendimiento.
A continuación te presentamos las lesiones más comunes del ciclismo en rodillas, espalda y cuello, así como sus causas y soluciones.

1.- Lesiones comunes de rodilla
La rodilla es una de las articulaciones que más sufre en el ciclismo, debido al movimiento repetitivo del pedaleo y a la fuerza que se ejerce sobre ella. Una de las lesiones más frecuentes es la condromalacia rotuliana, que se manifiesta como dolor en la parte frontal de la rodilla, causado por el desgaste del cartílago.
Otras afecciones comunes son la tendinitis rotuliana y el síndrome de la banda iliotibial, especialmente cuando hay un mal ajuste del sillín o una alineación incorrecta del pedal. Cuando se realiza esta actividad de forma amateur o semiprofesional es común que se incurra en malas posiciones o acciones erróneas que generan un desgaste innecesario de las articulaciones.
En estos casos, el fisioterapeuta puede intervenir mediante técnicas como terapia manual, ejercicios de fortalecimiento y estiramiento muscular, corrección postural y asesoría en la biomecánica de la bicicleta. Además, es posible trabajar la activación de los glúteos y la estabilidad de la cadera, ya que estas zonas influyen directamente en la alineación de la rodilla.
2.- Lesiones comunes de espalda
El dolor en la zona lumbar o dorsal es común en ciclistas que pasan largas horas encorvados sobre la bicicleta. Una posición prolongada sin descanso llega a provocar fatiga muscular, compresión vertebral y tensión en los músculos paravertebrales. Además, una mala colocación del manillar o una falta de movilidad en la cadera pueden aumentar la carga sobre la espalda.
Con la ayuda de la terapia física es posible mejorar la movilidad de la columna, fortalecer el core (zona media) y liberar tensiones acumuladas mediante masoterapia, ejercicios de estabilización lumbopélvica y estiramientos. También es fundamental trabajar la educación postural para asegurar una posición más ergonómica sobre la bicicleta.
3.- Lesiones comunes en el cuello
El dolor de cuello o la cervicalgia en ciclistas suele estar relacionado con la necesidad constante de levantar la cabeza para mirar el camino mientras se mantiene una postura fija sobre el manillar. Esto genera una sobrecarga en la musculatura cervical y en los hombros, lo cual provoca rigidez, dolor e incluso cefaleas.
Un especialistas en estas lesiones puede aplicar técnicas de liberación miofascial, movilizaciones cervicales y ejercicios de fortalecimiento para los músculos del cuello y la parte superior de la espalda. También se puede trabajar en mejorar la postura general del ciclista y realizar ajustes ergonómicos en la bicicleta, como cambiar la altura o el tipo de manillar.

4.- Importancia de la fisioterapia en el ciclismo
Más allá del tratamiento de lesiones, la fisioterapia preventiva es clave para que el ciclista logre evitar molestias crónicas y mejorar su rendimiento deportivo. Un fisioterapeuta especializado puede realizar evaluaciones funcionales, diseñar rutinas personalizadas y enseñar ejercicios que aumenten la movilidad articular y el equilibrio muscular.
También se recomienda incluir prácticas como el calentamiento dinámico antes de rodar, la recuperación activa tras la sesión y técnicas de relajación muscular, como el uso de foam rollers, crioterapia o masajes deportivos.
Te invitamos a revisar nuestro blog para conocer más acerca de estos cuidados preventivos y especiales que eviten lesiones graves en el ciclismo u otros deportes. Recuerda que un tratamiento fisioterapéutico adecuado marca la diferencia en la corrección de desequilibrios musculares, la mejora biomecánica del pedaleo y la salud general del sistema musculoesquelético del ciclista.